Este sábado a las 21, en el Gran Salón de Plataforma Lavardén (Sarmiento y Mendoza), el grupo rosarino Hijos de Buda presenta la producción audiovisual Bienvenidos, un viaje de imágenes y sonidos por el jazz manouche y el legado de Django Reinhart.

Bienvenidos es “una muestra de las dos caras de nuestros conciertos: el fragor de la batalla, lo ardiente de la improvisación y lo luminoso de la fiesta y, del otro lado, la solemnidad de lo certero, lo tenue y lo delicadamente íntimo de la unión cuando las luces se apagan”, indican desde el grupo.

El mismo está integrado por Julián Cicerchia, en guitarra eléctrica; Sebastián Teglia, en guitarra manouche; Pablo Galimberti, en violín; Mauricio Boechi, en acordeón; Daniel Lara, en guitarra manouche; y Bernardo Daluicio, en contrabajo.

Con la intención de expresar esas “dos caras”, Hijos de Buda preparó un concierto especial para este sábado. “Siempre tratamos de que los shows sean algo genuino, particular; por eso nos vamos a presentar en un círculo, para incluir al público”, indicó Julián Cicerchia a Rosario3.

“Es un concierto para todas las edades en donde se podrá apreciar el zoológico organizado que es Hijos de Buda. En realidad, es un poco la idea de siempre: que el público se sienta parte de lo que hacemos”, continuó el guitarrista.

Respecto de Bienvenidos, el músico explicó que la producción audiovisual “es el fruto del trabajo cosechado en los tres años que la agrupación lleva como sexteto. Con ese cambio, el tren artístico se empezó a motorizar muchísimo más. Empezaron a surgir muchísimas ideas y, una de esas, fue esta esta película a modo de concierto”.

Hijos de Buda comenzó como proyecto en 2012, con la unión fortuita de Sebastian Teglia y el propio Cicerchia. Desde entonces, la banda pasó por distintas formaciones hasta la actual que, para el entrevistado “quizás sea la más solida, tanto humana como como musical”.

En el círculo al que Cicerchia define como “rueda gitana”, que además de música tiene canto, el grupo expresa “de dónde venimos, hacia dónde vamos” y reafirma la idea de que “el amor es lo que prima, igual que compañerismo”. En tanto que el futuro que auguran los Hijos de Buda para el grupo es “seguir trabajando, proyectando y abriendo puertas”, además de “tratar de agrandar el círculo” a nuevos públicos.

Las entradas para el concierto de este sábado en el Gran Salón puede adquirirse en la web entradaslavarden.com y en la boletería de Plataforma Lavardén.