Lizy Tagliani no está pasando por un buen momento. Viviana Canosa la acusó de ladrona y luego la vinculó a una presunta red de trata y pedofília. Si bien la humorista señaló que está tranquila porque todas las acusaciones son falsas, se mostró muy angustiada por lo que podría pasar con Tati, su hijo.
Mariana Brey le preguntó a Lizy si en estos días decidió explicarle al nene la situación que estaba atravesando. “¿Cómo le voy a explicar a un nene de cuatro años? Él está feliz, jugando”, expresó ella y agregó: “Le pedí a Sebas (su pareja) que no conteste, que no divulgue, que no haga nada. Porque alguien de la familia tiene que estar protegido para ir a buscar al nene a la escuela con la frente en alto”.
En el programa también hicieron referencia a que faltan pocos días para el juicio en el que se definirá la adopción definitiva de Tagliani. Por eso, le consultaron si tenía miedo tras las acusaciones en su contra. “No tengo miedo porque estoy segura. Pero tengo miedo de que sea ahora, que me lo saquen ahora. ¿Cómo va a volver el nene a un hogar? Confío plenamente en la justicia, nadie pensó en el niño”, manifestó.
Lizy también se refirió al rumor de que Fernando Burlando no quiso representarla. “Yo nunca lo llamé. Sí hablé mucho, también de estos temas”, aclaró para desmentir esas versiones. “Los quiero un montón”, expresó por el vínculo que tiene tanto con él como con Barby Franco, y agregó: “No quería exponerlo a tomar una partida solo porque somos amigos, con la responsabilidad que significa representar a alguien en un juicio y capaz después tirás por la borda una amistad”.