El juez Ricardo Lorenzetti destaco la figura del Papa Francisco resaltando sus virtudes y su poder de llegada a los fieles de todo el mundo. Compartió, además, algunas anécdotas de momentos que vivió a su lado, que sin dudas, lo marcaron para siempre.
El abogado y juez o de la Corte Suprema de la Nación, escribió una sentida columna en el diario Infobae bajo el título “Experiencias con el papa Francisco y su legado”. En estas líneas contó que estuvo en Roma por una cuestión académica, y fue invitado a asistir a la misa de Pascua. “Su aparición a las 12 del mediodía del domingo generó una verdadera alegría colectiva porque todos pensábamos que se había recuperado. Pero es probable que el papa Francisco lo haya pensado como una despedida, porque era muy consciente de su estado de salud. La alegría colectiva del Domingo de Pascua se transformó una tristeza generalizada durante el lunes”, lamentó.
“En mis primeros encuentros con el papa Francisco, me señaló que el hábito no hace al monje, y que el cargo no hace a las personas. Hay demasiadas personas en cargos importantes que solo se ocupan de sí mismos, y por eso fue muy crítico de la mediocridad, la ausencia de ideales, y de la corrupción. Francisco nos enseña que los cargos solo tienen sentido si uno entiende que son para transformar la sociedad, y eso es lo que él promovió constantemente: transformó la Iglesia”, recordó a modo de reflexión.
De acuerdo a lo que manifestó, Francisco “siempre trató de acortar la distancia entre el cargo que ocupaba y las personas” y precisó en ese sentido: “En cierta oportunidad me dijo: ¿sabe por qué permito que todos los que lo desean se saquen fotos conmigo?, si hay una sola foto, tiene valor y pueden pensar que lo que hace esa persona me representa; pero si hay cientos de fotos, ya no tiene esa importancia”.
Luego, recordó una experiencia muy particular con el Santo Padre, de quien advirtió: “Trató de ser informal para que lo veamos humano”. Según escribió, estuvo en un encuentro con Francisco, del que participó el cantante León Gieco. “El encuentro celebrado por el diálogo interreligioso era formal, con más de cien personas en un salón del Vaticano, y el Santo Padre sentado solo enfrente del público que lo escuchaba en silencio. Pero cuando León Gieco tomó su guitarra, Francisco se levantó, se sentó en la primera fila, al lado mío, me tomó de la mano y su gesto nos emocionó a todos, a tal punto que terminamos cantando esa hermosa canción de León por la paz”, contó.

En otro párrafo cargado de elogios hacia su persona, reflexionó: “Fue un pastor que siempre sembró ideas porque creía en los ideales y fue coherente con ellos toda su vida. Cuando Bergoglio no era Francisco, estaba en Buenos Aires, en tiempos muy difíciles, de mucha tensión, y me recibió para decirme que solo la fe y los ideales pueden hacernos fuertes y protegernos”.
Para Lorenzetti, el Papa “logró vincular la fe religiosa con los grandes problemas actuales de la humanidad” Y en ese marco, mencionó la causa del ambiente como central en su legado.
“Eligió el nombre de Francisco, porque San Francisco de Asis representaba la austeridad y el amor por la naturaleza. La Encícilia “Laudato Si” es un documento que no solo está dirigido a la cristiandad, sino a la humanidad. Es la idea de que la sociedad en que vivimos está agotada y se necesita un nuevo modelo, un humanismo respetuoso del entorno. Trabajé muchos años en reuniones ambientales que se hicieron en todo el mundo y Francisco apoyó siempre, sin dudarlo”, añadió.
Además, remarcó que se haya ocupado de la inteligencia artificial. “Hace cincuenta años comenzó la preocupación por los efectos perjudiciales de la acción humana sobre el ambiente, y ahora comienza el temor de la acción humana sobre el ser humano. Francisco convocó a una reunión por el tema en el año 2020, y sugirió el término “algorética”. Esta es una de las razones de mi presencia en Roma, porque, junto con el ambiente, es el gran desafío de la humanidad”, subrayó.
Por último recordó: “En la pandemia, cuando solo había miedo e incertidumbre, Francisco caminó solo en una plaza San Pedro vacía, y su mensaje fue reemplazar el miedo por la esperanza. El último 27 de marzo de 2025 hicimos un evento para recordar esa “Statio Orbis”, que es un mensaje de esperanza en una humanidad desilusionada”.
Para finalizar su homenaje, el magistrado consideró: “Creo que el mejor homenaje que podemos hacer es recuperar ese legado y divulgarlo, porque solo un humanismo solidario, integrado en la naturaleza, puede darnos una salida. Necesitamos narradores morales de la humanidad”. Y concluyó con una frase directa al lider espiritual: “Gracias por todo Papa Francisco”.