La Basílica de San Pedro amaneció repleta de fieles que esperan poder darle el último adiós al papa Francisco. Es que la oficina de las Celebraciones Litúrgicas del Sumo Pontífice comunicó que, hoy “25 de abril, a las 20.00 horas el cardenal Kevin Joseph Farrell, Camarlengo de la Santa Romana Iglesia, presidirá el rito del cierre del féretro del Romano Pontífice Francisco, según lo previsto en el Ordo Exsequiarum Romani Pontificis (nn. 66-81)”. El sábado tendrá lugar la Misa exequial y luego los restos del argentino serán acompañados a la Básilica Papal de Santa María la Mayor para su sepultura, por ese motivo comenzó el "blindaje" de Roma, a la espera de la llegada de diferentes líderes mundiales que participarán de la ceremonia. 

En la celebración de este viernes, participarán el cardenal Kevin Joseph Farrell, Camarlengo de la Santa Iglesia Romana; el cardenal Giovanni Battista Re, Decano del Colegio Cardenalicio; el cardenal Roger Michael Mahony, Cardenal Presbítero; el cardenal Dominique Mamberti, Cardenal Protodiácono; el cardenal Mauro Gambetti, Arcipreste de la Basílica Papal de San Pedro en el Vaticano.

Además, estarán presentes el cardenal Pietro Parolin, exsecretario de Estado; el cardenal Baldassare Reina, Vicario General de Su Santidad para la Diócesis de Roma; el cardenal Konrad Krajewski, Limosnero de Su Santidad; monseñor Edgar Peña Parra, Sustituto de la Secretaría de Estado; monseñor Ilson de Jesus Montanari, Vice Camarlengo de la Santa Iglesia Romana; monseñor Leonardo Sapienza, Regente de la Casa Pontificia; los Canónigos del Capítulo Vaticano, los Penitenciarios Menores Vaticanos Ordinarios; los secretarios del Santo Padre y otras personas admitidas por el Maestro de las Celebraciones Litúrgicas Pontificias, monseñor Diego Ravelli.

Mientras tanto, el día sábado el cortejo fúnebre desde San Pedro del Vaticano hasta la basílica de Santa María la Mayor serán seis kilómetros a recorrer en el corazón de Roma. La ruta seguirá parcialmente el trazado de la Via Papalis, la procesión que hacían antiguamente los pontífices tras ser designados entre San Pedro del Vaticano y la basílica de San Juan de Letrán, catedral de la diócesis de Roma.

Esta ceremonia, rescoldo de los antiguos desfiles del Imperio romano, constituía el primer acto oficial del pontífice como obispo de Roma.